Este es un artículo de un interesantísimo blog de una ingeniería llamada Berra Ingenieros.
El siguiente caso es una situación típica en los forjados que se proyectan con juntas sin doble pilar, es decir, mediante el empleo de elementos conectores que permiten la dilatación, donde los elevados ritmos de producción hacen que a veces se cometan pequeños errores como resultado de una mala interpretación de detalles específicos (o de la falta de ellos en algunos casos).
La armadura de la viga que llega al pilar no estaba diseñada tal y como se ejecutó, ya que tenía previsto el correspondiente detalle de interrupción de armadura y la disposición de una serie de conectores adecuados a la carga a resistir.
Sin embargo, en obra se pasó toda la armadura de la viga hasta darle continuidad con la viga del siguiente módulo, rompiendo por tanto la junta. El edificio, al dilatar, tiene impedido el movimiento por esa armadura pasante, por lo que el nudo rompió por el punto más débil, es decir, por la cabeza del pilar, rompiendo el hormigón como se ve en las fotos.
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